El home office o teletrabajo solía ser una forma de trabajar que muchos podían experimentar una vez a la semana. Los beneficios son múltiples: trabajar desde casa con el pijama puesto, ganarle horas de tiempo al transporte y variar un poco la rutina están entre los más mencionados. Sin embargo, es necesario adaptar la casa para el home office.
Desde que comenzó la cuarentena por el coronavirus, quienes pudieron convertir su trabajo en teletrabajo, hoy hacen su rutina enteramente desde casa. Si bien hay algunas comodidades en esta manera de trabajar, cuando la casa también se vuelve la oficina, nos enfrentamos a algunos desafíos para reorganizar y optimizar el espacio.
En este posteo te contamos todo lo que tenés que saber para convertir tu casa en la mejor oficina y enamorarte del teletrabajo.
Adaptar la casa para el home office
Si estás entre los afortunados que tienen una oficina propia en casa, probablemente solo debas hacerle unos pequeños ajustes. Si vivís en una casa con poco espacio, te va a tocar elegir el mejor rincón para instalar allí tu mesa o escritorio.
¿Qué tener en cuenta para elegirlo? Hay dos aspectos que son fundamentales.
- Luz. Si tenés un rincón con luz natural privilegialo frente a los demás.
- Funcionalidad. Ubicate en un espacio que no entorpezca tu rutina cotidiana ni la de las personas que viven con vos.
- Fondo. Ahora que toda la comunicación se hace a través de videollamadas, elegí un espacio neutro que pueda aparecer en tus comunicaciones. De ser posible, intentá que no sea un espacio por el que suelan circular quienes viven con vos para no invadirlos o exponerlos.
Silla para trabajar: la reina del home office
Cuando lo hacías una vez a la semana podías restarle importancia. Pero ahora que tu silla de home office se convirtió en tu asiento diario, deberás preocuparte por cuidar la salud de tu postura.
Muchas empresas eligieron enviar las sillas de sus oficinas a sus empleados. Si la tuya no fue una de esas, te tocará conseguírtela vos mismo. Aquí te compartimos algunas alternativas a considerar:
- Silla ergonómica. Tu opción más rápida y fácil será correr a una tienda online y buscar una silla cómoda. Tené en cuenta que se adecúe a la altura de tu mesa, y que los apoyabrazos puedan pasar por debajo suyo para más comodidad.
- Soporte lumbar para silla. Existen distintos dispositivos para “convertir” una silla común en una ergonómica, que son mucho más económicos y ahorran espacio en una casa.
- Regular altura y postura. Con una silla común y ayudado por almohadones, podés conseguir la ergonomía que necesitás para trabajar. Si tenés dudas sobre cómo sentarte bien durante el trabajo, te recomendamos que veas este video.
Escritorio y organización de tu superficie de trabajo
- Si tu oficina ahora será tu living, es importante que cuides el orden. Esto te ayudará con la concentración de tu día a día y evitará que tu casa se convierta en un caos.
- Si sos de los que todavía usan papeles, encontrá un cajón en el que al final del día puedas poner todo y ponerlo fuera de tu vista. Al comenzar, también será más sencillo “rearmar tu oficina”.
- Podés recurrir a escritorios flotantes o mesas extraíbles de trabajo, si te resultan cómodas. Estos dos recursos te pueden ahorrar espacio y ayudarte a montar una oficina fácil de guardar.
Administrar el tiempo y el espacio también son parte de adaptar la casa para el home office
Uno de los principales desafíos del home office es poder delimitar dónde termina la vida personal y dónde empieza la vida laboral. En esto, el tiempo y el espacio que le dediques a tu trabajo serán determinantes.
Por eso, es importante que:
- Cada vez que puedas respetes tu horario de comienzo y finalización de la jornada laboral.
- Cuides el orden tanto de tus elementos de trabajo como de tu vida cotidiana (en este posteo te explicamos cómo) para que una no intervenga en la otra.
- Busques la productividad, pero también preserves tu tiempo de ocio.
Si tu rutina cambió y tenés que hacer espacio, podés cotizar tu lugar de guardado fuera de tu casa con Space Guru y vivir más feliz, con menos desorden.